Empujar las cutículas hacia atrás: ¡así se hace!
Es aconsejable empujar hacia atrás las cutículas semanalmente. Esto no sólo permite que las uñas crezcan correctamente, sino que también hace que parezcan más largas y cuidadas. Pero, ¿cómo hay que empujar las cutículas hacia atrás? Aquí tienes los mejores trucos y consejos.
¿Por qué empujar hacia atrás las cutículas?
La cutícula es ese trozo transparente de piel fina que se encuentra entre el dedo y la uña. Las cutículas constituyen una barrera contra las bacterias y los hongos, por lo que tienen una función importante. Aun así, pueden volverse desagradables: endurecerse, secarse e incluso agrietarse. Sus cutículas pueden sangrar y puede formarse una herida. Pero lo más frecuente es que las cutículas se sequen, se peguen al lecho ungueal e impidan así el crecimiento de la uña. La uña puede incluso deformarse ligeramente como consecuencia de ello.
Al empujar hacia atrás las cutículas con regularidad, puede evitar que esto suceda. Además, las cutículas retraídas hacen que tus uñas parezcan más largas. Sin embargo, es importante saber cómo empujar las cutículas hacia atrás. De hecho, este frágil trozo de piel necesita primero un poco de atención.
Cómo empujar hacia atrás tus cutículas
.Trabajarás con un punto propenso a bacterias e infecciones, así que antes de empezar a empujar tus cutículas hacia atrás, es importante limpiar tus uñas completamente. Elimine todo el esmalte de uñas con un quitaesmalte sin acetona. De este modo, evitarás que pequeños restos de esmalte de uñas se deslicen bajo la piel, lo que podría provocar una infección.
A continuación, sumerja las cutículas durante unos minutos en un recipiente con agua tibia y un poco de aceite de coco - que es calmante y tiene la propiedad de ser bactericida. El agua caliente ablanda las cutículas, tras lo cual puedes empujarlas hacia atrás con más facilidad. También puedes retraer las cutículas perfectamente después de un baño caliente o una ducha suave. Utilizar un aceite especial para cutículas hará que la piel esté aún más suave. Por ejemplo, el Lápiz suavizante de cutículas tiene un efecto calmante gracias a las propiedades cuidadoras del aguacate y el aceite de almendras. El aceite se aplica fácilmente sobre las cutículas con el lápiz.
Ponga la mano plana y empuje hacia atrás las cutículas con el bolígrafo o con el Pulsador de Cutículas cuidadosamente. No ejerza demasiada presión para evitar que se agriete. Una vez que hayas terminado con todos los dedos, límpiate las cutículas con un algodón.
Qué necesitas para empujar hacia atrás las cutículas:
En cuanto empiece a empujar hacia atrás las cutículas, necesitará varios atributos:
- Un quitaesmalte sin acetona para limpiar tus uñas, como el quitaesmalte Caring, que, gracias a su ingrediente Lanolina, evita que se sequen y hace que tus uñas brillen.
- Con un gel exfoliante para cutículas, se eliminan las cutículas pegadas en un minuto. El peeling elimina la piel suelta, dejando libre la superficie de la uña.
- Con un aceite suavizante, como el Lápiz Suavizante de Cutículas, ablandarás y suavizarás tus cutículas. El aguacate y el aceite de almendras hacen que tus cutículas sean más elásticas y menos rígidas.
- El Removedor de Cutículas ablanda las partículas duras de la piel para que empujar las uñas hacia atrás sea aún más fácil.
- Un empujador de cutículas, o empujador bucal, es un palo con un extremo redondo y angulado. Con este bisel, empuja suavemente la cutícula hacia atrás.
- Para mantener las cutículas suaves e hidratadas, lubrícalas con una crema de cuidado todos los días. La Crema para cutículas previene el desgarro de las cutículas y las mantiene suaves y flexibles.
- Para cutículas maltratadas, utilizar el Reparador Nocturno de Cutículas. Esta pluma maravillosa cuida las heridas y repara las cutículas secas, inflamadas y dolorosas.